Guía del programa
Las reseñas de los críticos de la Pasión según san Mateo en la Philharmonie estuvieron llenas de superlativos. La emisora de radio RBB Kultur la calificó de “¡un momento de gloria para Rattle! Y una de las mejores tardes con la Filarmónica durante años”. Los elogios de los medios de comunicación no se limitaron a la Filarmónica de Berlín y a su director titular, sino que se ampliaron a lo que se denomina la “ritualización” del famoso director de escena estadounidense Peter Sellars. Según el Berliner Zeitung, la producción semiescénica se tradujo en “el concierto más emocionante y el acontecimiento musical escénico de la temporada”.
Para el Tagesspiegel de Berlín, “las estrellas de estas tres horas y media [...] fueron las voces deslumbrantemente brillantes y poderosas de los niños del Coro Estatal y de la Catedral de Berlín (director del coro: Kai-Uwe Jirka) y del Coro de la Radio de Berlín, extraordinariamente preparado por Simon Halsey. Las notorias secciones de caos como ‘Ja nicht auf das Fest’ y los gritos de Cristo al ser crucificado sonaron de un modo que fue a un tiempo transparente y natural, naciendo del tumulto de una manera casi improvisada ante la que sólo cabe maravillarse”.
Los solistas también desempeñaron su papel, por supuesto, en el éxito de la velada. El Berliner Morgenpost escribió: “Christian Gerhaher canta el papel de Cristo de un modo soberbio y decidido de entre el público, desde un balcón situado a la izquierda del escenario. […] Mark Padmore, por su parte, controla el escenario, cantando el Evangelista con su voz de tenor casi inagotable, otorgando plena expresión a cada uno de los matices. […] A Padmore se le acerca a su vez […] la maravillosamente sonora soprano sueca Camilla Tilling […] y la grandiosa Magdalena Kožená con su voz de contralto voluptuosamente expansiva [...]: el canto milagroso de una voz se ve seguido del de otra. Thomas Quasthoff ofrece una interpretación muy vívida de las arias de bajo [...] cantándolas con una nobleza incomparable. El excelente cantante finlandés Topi Lehtipuu afrontó las arias de tenor con delicadeza e intensidad”.
